Seignosse está situada en el suroeste de Francia, en la Côte d’Argent, una región conocida por sus paisajes, su clima suave y la riqueza de su territorio. El proyecto debe considerarse tanto a pequeña escala como en términos más amplio de su historia y su geografía.

La región de los Landes ha sido durante mucho tiempo una zona poco poblada porque era hostil al ser humano. Hasta el siglo XVIII era un inmenso pantano inaccesible, donde los pastores locales se desplazaban sobre zancos tanto para mantener los pies fuera del agua como para vigilar su rebaño desde lejos. Se llama el país llano por la casi ausencia de rasgos topográficos, característica que se explica por su geología.

El terreno está formado por una meseta calcárea poco profunda cubierta de sedimentos. La capa de roca es impermeable, por lo que el agua de lluvia fluye muy lentamente hacia el océano, formando así estos humedales. Para superar esto, durante el Siglo de las Luces el Estado francés decidió gestionar el territorio plantando árboles adecuados, inicialmente alcornoques para su uso en la industria del corcho. Este árbol, muy presente en la región, nos interesa especialmente para el proyecto.

Posteriormente se emprendió un programa de gestión del territorio a mayor escala mediante la plantación de pinos marítimos y el establecimiento del “cordón dunar” a lo largo de la costa atlántica para proteger el bosque del océano. Es el mayor bosque de pinos de Europa, como puede apreciarse en la perfecta alineación de los árboles en este paisaje continuo creado por el hombre.

Esta situación ha desarrollado algunos ejemplos de arquitectura vernácula: casas de entramado de madera con aleros pronunciados y un zócalo de mampostería que responde al clima de la región. También las cabañas de los gemmeurs, los encargados de recoger la resina de los pinos, cuyas viviendas estaban hechas de grandes tablas de pino cubiertas de resina para protegerlas.

De este análisis sacamos ideas claras que constituyeron la base de nuestra reflexión y del diseño del proyecto.

El primer paso es subirse para protegerse del agua y ver más allá: pensar en un proyecto sobre zancos.

A partir de la colocación de los pinos, conservamos una trama cuadriculada, una coherencia de diseño que permite puntuar el proyecto, tanto en planta como en sección, mediante la repetición de elementos verticales que recuerdan la esbeltez de los troncos de los pinos.

Entendemos las características del clima abrigando las fachadas con cubiertas en voladizo, porque es necesario protegerse tanto de la lluvia como del sol que va y viene con el viento. Construir edificaciones sencillas, en armonía con el paisaje.

Entendemos todo el emplazamiento como parte de un todo, una visión holística de la arquitectura que es totalmente el resultado de su situación.

Empezando por el paisaje

Pensamos en este proyecto como un jardín habitado, una fusión entre naturaleza y arquitectura, que rompe los límites entre interior y exterior. Una parcela que se puede utilizar en su totalidad, viviendo según la luz y las estaciones. Construir una casa inteligente que sea fácil de activar y requiera poco mantenimiento. Un lugar que desafía las ideas preconcebidas. Analizamos la parcela bajo cuatro secuencias, cada una de las cuales corresponde a un propósito: usar, vivir, disfrutar, mirar.

El programa es muy claro, y define una serie de volúmenes que tienen relaciones especiales entre sí. El tratamiento del paisaje debe unificar el conjunto.

La construcción comienza entonces a tomar forma: la casa de invitados independiente, el garaje con su cochera, la casa principal y sus terrazas cubiertas, la piscina con su cocina de verano y, finalmente, el estudio en la parte trasera del jardín. Se distribuyen cuidadosamente por el terreno en función de sus usos y su orientación. Todo está conectado por terrazas elevadas, cubiertas o al aire libre.

El Plan Local de Ordenación Urbana impone una superficie construida del 30%, un remetimiento respecto a la calle y los vecinos, alturas máximas y la elevación del nivel del suelo en 30 cm respecto al terreno natural. Hemos integrado estas limitaciones en el proyecto como activos para hacerlo más discreto y limitar las molestias de la calle y de los edificios vecinos.

El seto rectilíneo a lo largo de la fachada se mantiene como una reliquia cultural: detrás de él crece un exuberante jardín, formado por especies locales como el pino marítimo y el pino paraguas, la encina y el alcornoque, la retama y la aliaga, especies que requieren poco mantenimiento y consumen poca agua. Se trata de crear un universo específico que evoluciona a lo largo del año, con grandes helechos que le dan un aspecto tropical respetando las especies endémicas. Un paisaje nutrido con varias zonas dedicadas al huerto.

Se conservan todos los árboles existentes y se plantan otros nuevos entre las construcciones, como árboles de hoja caduca cerca de las fachadas para protegerlos en verano y dejar pasar la luz en invierno. Gran parte del proyecto se basa en cimientos de tornillos reversibles. Esto permite un impacto mínimo en el suelo y no daña las raíces, creando un refugio debajo para la fauna local. Con la idea de un diseño biofílico, el proyecto se compromete a tener un bajo impacto en el lugar.

El proyecto

Al diseñar el proyecto, nos centramos en los recursos ya presentes en el lugar, así como en la posibilidad de utilizar materiales procedentes de la demolición de la casa existente.

Destacan varios elementos, como la cubierta de tejas que, una vez derribada, puede servir de revestimiento para el acceso, un tono rojo que contrasta con la vegetación y permite la circulación de vehículos como si se tratara de una partida de petanca.

Parte de la mampostería puede reutilizarse tras su trituración como escombros de hormigón necesarios para la casa principal. El acristalamiento puede enviarse a un centro de reciclaje para reutilizarlo como material aislante como el que se utiliza actualmente bajo el forjado de la casa. El resto de los materiales se donaría a las asociaciones de reciclaje con las que trabajamos habitualmente.

El sistema de construcción y los materiales utilizados son la base para entender el proyecto. Todas las fachadas del edificio están revestidas de corcho, un material local resistente a la putrefacción. La línea de cubierta de todos los volúmenes forma una sola pendiente. Los tejados de chapa ondulada evocan la imagen de las cabañas de surf y reflejan el paisaje circundante. El agua de lluvia se recoge en cisternas para regar el jardín y puede reutilizarse para los aseos y la lavadora.

La casa familiar se compone de tres paredes de hormigón reciclado con bajas emisiones de carbono, y está aislada del exterior con una gruesa capa de fibra de madera. Su fachada sur está completamente acristalada, protegida por grandes aleros que se apoyan en postes de madera pregrabados para garantizar su estabilidad en el tiempo. Los anexos son todos de entramado de madera, elevados por encima del suelo con los pilares atornillados. Gracias a la repetición de los elementos, gran parte puede ser prefabricada, incluida la casa de invitados, que puede estar lista para su uso antes que el resto.

Para cumplir los criterios de las casas pasivas, hemos organizado todas las construcciones en planos rectangulares y compactos. La certificación se basa únicamente en la casa principal, que cumple todas las exigencias y el cálculo del PHPP: menos de 15 kWh/m2/año, extremadamente bien aislada, hermética, con un muy buen sistema de ventilación de doble flujo y una ganancia solar generosa pero controlada.

Hemos mejorado el confort en verano gracias a las secciones transversales que favorecen la ventilación natural, la inercia térmica de los muros y suelos de hormigón, que conservan el frescor, y la implantación de sistemas de oscurecimiento exterior en todas las ventanas expuestas.

Pretendemos que este proyecto sea sobrio y discreto, que sea una arquitectura inteligente y minimalista, a la vez sencilla y contemporánea, donde la belleza reside tanto en los volúmenes como en los detalles.

 

IUA Ignacio Urquiza Arquitectos en colaboración con A6A y APDA Ana Paula de Alba

Seignosse, Francia, 2021

306 m2

Passive HouseSeignosse, Francia, 2021En colaboración con A6A & APDA
PILARES 02 Álvaro ObregónCiudad de México, 2020En colaboración con WORKac (Amale Andraos & Dan Wood)

El edificio existente de cinco niveles está ubicado cerca de una plaza en el céntrico barrio de la Roma Norte. La pequeña plaza arbolada está rodeada por calles animadas y concurridas. Al mismo tiempo esta queda resguardada de las cercanas vialidades traficadas, de tal suerte que las calles adyacentes al edificio gozan de una privilegiada tranquilidad.

El edificio existente de los años sesenta contrasta por su austeridad con el entorno lleno de color.

Claramente influenciada por el lenguaje arquitectónico de su tiempo, la fachada está recubierta por superficies lisas de colores sobrios. Es solo después de una mirada más atenta que las cualidades del edificio se hacen evidentes, las proporciones de las dos fachadas principales están perfectamente moduladas con un diseño inesperadamente contemporáneo. La intervención conferirá al edificio residencial una apariencia fresca y renovada. La modulación de las ventanas se conservará, a excepción de la franja superior del ultimo nivel que será ampliada. La simple elegancia del diseño exterior será valorizada por una nueva materialidad y la intervención será inmediatamente visible para el visitante: un nuevo frente conformado por una sutil malla metálica colocada frente al paramento existente correrá a lo largo de toda la planta baja.

El nuevo programa del edificio refleja el actual: la planta baja de uso público, cinco niveles de departamentos y una terraza semi pública en el nivel de azotea.

La entrada al edificio, con su característica marquesina, se complementa con un atractivo programa para los inquilinos: un pequeño café, un gimnasio y un business center a los cuales se podrá acceder directamente desde el vestíbulo principal.

La configuración del edificio existente se caracteriza por una clara lógica constructiva. Una escalera en el límite suroeste da acceso a los departamentos distribuidos a lo largo de un pasillo. La planta tipo de forma regular, se desarrolla alrededor de dos patios interiores. El rediseño de las plantas se ha enfocado en el redimensionamiento de los departamentos existentes y en la creación de diversas áreas de estar de uso común.

La nueva interpretación del edificio se enfoca sobre la circulación vertical y horizontal, incluyendo los patios interiores que anteriormente eran espacios oscuros y poco atractivos. Un alto volumen de vidrio modulado con una ligera estructura metálica contiene un elevador y un núcleo de escaleras que conecta todos los niveles. La torre vertical, ligera y transparente, brinda mucha luz a los pasillos. La alternancia de áreas de estar, pasillos, patios llenos de vegetación y unos puentes ligeros volando sobre ellos, sorprende el visitante que llega al piso de los departamentos. En cada nivel el recorrido de las circulaciones horizontales es distinto provocando que el camino hacía cada departamento sea único.

Una parte del pasillo pertenece al edificio existente, otra parte conduce directamente a los puentes suspendidos que cruzan los patios. El nuevo sistema de circulación permite un acomodo flexible y eficiente de departamentos de menor tamaño.

Los nuevos departamentos se caracterizan por una distribución abierta. Las variaciones ocurren esencialmente por la orientación. Los departamentos se dividen en dos tipologías: los que se abren hacía las fachadas principales a norte y a oriente, y los que se abren hacía los patios interiores. Para asegurar la mayor iluminación posible, los patios están delimitados por tres fachadas totalmente acristaladas. Una sucesión de superficies transparentes y translucidas asegura la privacidad necesaria.

Las paredes interiores de los departamentos se disuelven provocando que el patio se perciba como una extensión de los espacios habitables inundados de luz.

La nueva piel de los patios está diseñada con el mismo lenguaje arquitectónico de la fachada de la planta baja y de la torre de escaleras. Vidrio y una sutil malla de metal, siguiendo una modulación reticular, se extienden hasta el techo. Los patios están cubiertos con una pérgola estructurada según un patrón diagonal. La pérgola está ubicada sobre el techo del edificio y ofrece protección tanto de la lluvia como del sol. La pérgola es una pieza dinámica y elegante que dialoga con los demás elementos de la intervención. Con su ligereza y transparencia lo nuevo se integra sin esfuerzo con lo existente mientras este permanece claramente legible.

El nuevo interior del edificio se caracteriza por vistas profundas y remates que generan sorpresa a través de la sucesión de espacios interiores y exteriores que favorecen el encuentro entre los habitantes.

 

Colonia Roma Norte, Ciudad de México, 2020

2,969.40 m2

GuaymasColonia Roma Norte, Ciudad de México, 2020En proceso
Plan Reserva El Torón EIIVentanilla, Mazunte, Oaxaca, 2019En proceso
Casa La MadroñaGuacalito de La Isla, Nicaragua, 2019En proceso

Se trata de un volumen elemental de 7 x 31 metros intervenido, a través de diferentes movimientos volumétricos, hasta llegar a su configuración definitiva. La percepción exterior como caja regular contrasta con el interior, resultado de diferentes ejercicios de sustracción que han ido dando forma tanto a la planta como a la sección.

La regularidad que aporta al conjunto la modulación de la estructura se distingue de los espacios orgánicos generados en el interior. Así, entre las salas interiores y el perímetro nace una serie de espacios intermedios con diferentes grados de apertura, patios, áreas porticadas, terrazas o espacios interiores de doble altura que dotan de gran riqueza la experiencia del habitar.

Todo el perímetro se resuelve con vidrio, de forma que la sensación de amplitud se ve multiplicada, reforzando la conexión con el exterior de una forma directa. La rigidez del módulo determinado por la partición del vidrio y el ritmo de la estructura no impiden el logro de generar espacios de tan distinta morfología y maneras de relacionarse con el exterior. De esta forma, la sorpresa se convierte en un elemento clave a la hora de recorrer los espacios y descubrir las variadas cualidades de las salas en ese dentro-fuera tan sugerente.

 

Colonia Lomas de Chapultepec, Ciudad de México, 2016

696 m2

CárpatosColonia Lomas de Chapultepec, Ciudad de México, 2016En proceso
Plan Reserva El TorónMazunte, Oaxaca, 2014En proceso
Casa de Ángela y JuanOcuilan de Arteaga, Estado de México, 2018Construido
Torre PedregalColonia Pedregal, Ciudad de México, 2015Conceptual
Infonavit Vivienda Unifamiliar Regional, PueblaPuebla, Puebla, 2014Conceptual
Pabellón El Eco 2013Colonia San Rafael, Ciudad de México, 2013Conceptual
Torre de tierraDolores Hidalgo, Guanajuato, 2010Construido
RebollarSan Miguel Chapultepec, Ciudad de México, 2010Construido
Casa MacariaPuerto Escondido, Oaxaca, 2008Construido